sábado, 12 de octubre de 2013

Cuando llegan las buenas noticias


Tocan el timbre, miramos por la mirilla y vemos a un señor bastante alto, regordete, con una gran sonrisa que trae algo bastante raro para esta época, un pergamino.
Con desconfianza le preguntamos quién es, qué quiere y el nos responde.  “Le traigo buenas noticias” –de quién le preguntamos, -Para usted, nos responde.
Nuestro estado de desconfianza continúa, pues rápidamente hemos pensado que no hemos jugado al loto, no participamos en ningún sorteo del supermercado, ni tenemos rifas del colegio.  Será una cámara oculta?
El señor del otro lado de la puerta aguarda a que le abramos. Qué fue lo que dijo?
Traigo buenas noticias y se las tengo que dar personalmente.
Abrimos la puerta con la ansiedad impresa en el rostro, pero el nos devuelve una mirada de alegría infinita y nos dice: mi nombre es Shen Cai y vengo desde muy lejos para darle esta noticia muy importante.
A esta altura ya ha traspuesto el umbral de nuestra casa y lo invitamos a sentarse en el living.  Damos una rápida mirada alrededor para ver si todo está en orden como para ponernos a tono; de qué se trata? Ah, en este pergamino están los símbolos que le auguran  una buena vida, mucho amor, una buena salud, paz y felicidad.
Nos quedamos mudos y empezamos a reflexionar
Cuántas veces nos hemos puesto a pedir por tener una buena salud para nosotros o nuestra familia, que todos nos llevemos bien y que no nos falte el dinero.
Cuántas veces, detenemos un poco nuestro ritmo de la agitada vida cotidiana, nos permitimos un gusto, nos hacemos los estudios que nos dice el médico en tiempo y forma aún con el sistema médico que tenemos, nos alimentamos correctamente, nos hidratamos, hacemos algo de caminatas, tratamos de ser más empáticos con nuestros hijos, ser más amorosos con nuestra pareja, dejamos algo de dinero por las dudas y no llegamos a agotar nuestra tarjeta de crédito.
Qué es lo que estás dejando de hacer?

Aquí viene Shen Cai, es bueno tenerlo para recordarnos que tenemos que contribuir a nuestra felicidad con acciones claras hoy. Cuántas veces hacemos las cosas bien hoy para no tener que preocuparnos mañana?


0 comentarios:

Publicar un comentario